Vea lo que la BlackBerry PlayBook, la HP TouchPad, la Motorola Xoom y la Samsung Galaxy Tab tienen que la Apple iPad no ofrece.
La Apple iPad 2 es un éxito de ventas. ¿Pero es la mejor tableta?
Para averiguarlo, pasé varias semanas probando algunas de sus competidoras. Descubrí que en un número sorprendente de aspectos, las otras tabletas realmente superan a la iPad.
Para esta comparación, puse a un lado las especificaciones del hardware. El éxito o fracaso de una tableta depende de su sistema operativo, que es lo que determina si ver vídeos, componer correo electrónico y navegar por la Web será un placer o una frustración.
Aunque la mayoría de los sistemas operativos para tabletas vienen en una sola marca de tableta, Google Android 3.0 es la selección de un número de fabricantes cada vez mayor. Para este número probé la Apple iPad 2 basada en el iOS 4.3, la RIM BlackBerry PlayBook basada en el Tablet OS de BlackBerry y la Acer Iconia Tab A500, la Motorola Xoom y la T-Mobile G-Slate, basadas en el Android 3.0. No pude contar con una versión final de la HP TouchPad basada en WebOS (que aparecerá este verano) para las pruebas, pero sí pude pasar algún tiempo usando una unidad de preproducción.
Además, de las tarjetas mencionadas, el equipo de PC World LA probó una unidad de preproducción de la tableta AOC Breeze con el sistema Android 2.3 (actualizable), la Samsung Galaxy Tab de 7 pulgadas con Android 2.2 y la Black-Berry PlayBook con la versión más reciente del Tablet OS, la 1.0.3.1868, que la ha dotado de una serie de nuevas capacidades.
Pantalla principal
Ventaja: BlackBerry Tablet OS, Android 3.0
La pantalla principal de la Tablet OS de BlackBerry, que tiene una elegante sencillez, realiza fluidamente las transiciones al pasar de una de las aplicaciones abiertas a otra cuando usted pasa el dedo por el panel de navegación, que ocupa dos terceras partes de la pantalla. RIM integró la navegación basada en gestos en el marco de la PlayBook: pasando el dedo hacia arriba muestra los menús dependientes del contexto, mientras que pasando el dedo hacia abajo revela la pantalla completa de la aplicación. BlackBerry también permite acceder con un toque a la información de Bluetooth, de Wi-Fi, de la batería y de la configuración general. Las notificaciones son sutiles, pues aparecen en la esquina superior derecha.
Las seis pantallas principales de Android 3.0 ofrecen control detallado sobre la organización y la presentación. El diseño es limpio y permite mover los iconos y widgets por todas las pantallas con facilidad. Los widgets ponen directamente en la pantalla la información actualizada regularmente, como su calendario, su correo electrónico reciente o el estado del tiempo. Toque un widget y será llevado a la aplicación relacionada con él. Estos atajos son fáciles de utilizar con el dedo, pero el parpadeo constante de las actualizaciones pudiera convertirse más en una distracción que en algo conveniente.
Android tiene en la esquina inferior izquierda botones de regreso, inicio y aplicaciones recientes; la barra de condición está abajo a la derecha. Ambos conjuntos de botones están integrados en la pantalla y rotarán cuando usted voltee la tableta. El botón de regreso no se comporta como usted pudiera suponer: si lo toca le hará salir completamente de la aplicación. El botón para las aplicaciones a las que ha accedido recientemente, a menudo llamado por error el botón de multitareas, produce miniaturas de las cinco aplicaciones que usted ha usado recientemente; pero aunque esté diseñado como medio de acceso directo, puede hacer que su dedo viaje más, no menos, para regresar a una aplicación.
Me gustan las renovadas notificaciones de Android en la barra de condición, que usted puede hacer aparecer con un toque. También se obtiene acceso más fácil a las configuraciones de uso regular como el modo de avión y Wi-Fi.
La pantalla principal del Apple iOS es formal y uniforme, pero no dinámica. El área inferior contiene hasta seis aplicaciones; el resto de sus aplicaciones están esparcidas en una de las numerosas (hasta 11) pantallas principales. Los iconos de las aplicaciones son estáticos y, a diferencia del Android 3.0, iOS no permite los widgets. Las notificaciones no tienen una ubicación fija, y aparecen en cuadros emergentes. La organización de las aplicaciones en diferentes pantallas o en carpetas es tediosa, ya sea en el iPad o en el software de escritorio de iTunes. Además, iOS entierra la configuración de uso regular en las capas del menú de configuración; usted no encontrará ningún acceso directo a ellas.
Al igual que en los teléfonos WebOS de HP, la TouchPad usa “tarjetas de actividad” para representar aplicaciones, archivos de medios, correo electrónico, o ventanas de navegador. Las tarjetas pueden estar solas o en una pila. Me gusta la flexibilidad de dividir las tarjetas, así como de amontonar las tarjetas conexas, aun cuando las fuentes sean aplicaciones distintas. Y me gustan las notificaciones situadas en la esquina superior derecha (toque un icono y podrá desplazarse por los avisos). WebOS también tiene uno de los mejores métodos que he visto para acceder a la configuración.
Correo
Ventaja: Android 3.0
Para el correo, el Android es ligeramente mejor que el iOS. Su versátil enfoque de triple panel para el correo electrónico facilita la navegación (pero si usted no usa Gmail tendrá que trabajar con la aplicación genérica para correo electrónico, que no le permite buscar mensajes; por lo menos, los puede organizar fácilmente en carpetas). Lo más importante es que el comportamiento de las pantallas de Android para el correo no es demasiado diferente entre la posición vertical y la horizontal.
Aunque la aplicación para Correo de Apple luce bien y es fácil de usar, su comportamiento es penosamente diferente según como usted sostenga la iPad. En la orientación de paisaje muestra dos paneles, mientras que en el modo de retrato tiene un panel emergente para moverse por los mensajes y la bandeja de entrada. Además, iOS pone más limitaciones que Android a la hora de bajar material: guarda archivos JPEG, PDF y de Microsoft Office, pero usted sólo los puede abrir en aplicaciones escritas para engancharse en la aplicación de Correo (por ejemplo, Pages, iBooks, o Evernote). Usted tampoco puede adjuntar un archivo directamente al mensaje; para enviar una foto, por ejemplo, tiene que iniciar el mensaje desde la imagen en Photo Roll, no en la aplicación de correo electrónico.
En el caso de la PlayBook, en el momento que escribíamos este artículo, RIM actualizaba su tableta con aplicaciones como BBM, Facebook for BlackBerry PlayBook (ambas muy esperadas). Además, ahora puede colocar atajos para marcadores de páginas en la pantalla inicial.
La función BlackBerry Bridge le permite acoplar un teléfono de BlackBerry con la PlayBook, de manera que usted pueda ver en la tableta el correo electrónico Messenger del teléfono, los contactos y la charla. Pero cuando desacople los dos dispositivos, los datos de Messenger desaparecerán de la PlayBook, una característica que debe resultar atractiva para los supervisores de los departamentos corporativos de informática que quieren limitar la diseminación de datos confidenciales.
La PlayBook tiene iconos para AOL Mail, Gmail, Hotmail y Yahoo Mail, pero son meramente atajos que llevan a esos servicios en el navegador de la Web. En mis pruebas, no pude agregar un anexo en Gmail, aunque sí pude hacerlo –aunque con problemas en los gráficos– en AOL Mail. Pude guardar los anexos del correo electrónico basado en la Web, pero encontrar los archivos nuevamente fue difícil y a veces no se abrían.
El correo electrónico de WebOS es parecido al de Android 3.0 en que está organizado en varios paneles. Un mensaje no puede ocupar su propia tarjeta de actividad a menos que usted oprima, por ejemplo, el botón de responder o de reexpedir; una vez que esté por su cuenta, usted puede amontonarlo con una página de la Web para crear un centro de contenido relacionado. Usted puede guardar uno o todos los anexos, o abrir un anexo, pero no vi suficiente de las aplicaciones de la TouchPad para determinar cómo se relacionan los anexos con ellas.